Tras unos meses desde la llegada de la pandemia provocada por el COVID19, y sin conocer cómo va a ser la evolución de la situación, podemos ir analizando la importancia de estar preparados y ser ágiles en la respuesta ante situaciones de emergencia, las empresas que se han adaptado antes a la nueva situación, que han sabido reaccionar han notado en menor media el impacto.
Dando por hecho que la primera prioridad ha sido la seguridad de todos los trabajadores (Plan de Contingencia), entendemos que los siguientes tienen que ir dirigidos a:
- Asegurar, en la medida de lo posible, la tesorería de la empresa (análisis, reajuste de presupuestos, medidas a tomar)
- Plan de continuidad (teletrabajo, grupos de trabajo independientes para mitigar impacto en caso de un positivo, …)
- Colaboración y acuerdos con clientes y proveedores, tienen que ser nuestros mayores aliados.
- Revisar el Plan estratégico de la empresa y a partir del Plan establecido replantearse sistemas que se daban por correctos, replantear procesos de trabajo, optimizar recursos, implantar sistemas de trabajo por objetivos, analizar tareas,…
Cada empresa debe emprender su propio camino, aprendiendo de los demás pero decidiendo en función de sus contexto y situación.
Otro aspecto a destacar durante la crisis es la apuesta por la Sostenibilidad y por la Responsabilidad Social de las empresas, es el momento de integrar estos aspectos en la estrategia de la empresa y desarrollar planes de manera trasversal en los organizaciones, las empresas con estrategias de ética y sostenibilidad han conseguido mayor fidelidad de sus clientes.